Las renovables también bajan el precio de la electricidad en Europa

Las renovables también bajan el precio de la electricidad en EuropaEn el Consejo Europeo del pasado 22 de mayo, la Comisión Europea presentó una contribución sobre “Política energética y sus desafíos” en la que se puede leer que el aumento de la proporción de renovables en el consumo final de energía en Europa “tiene potencial para mantener los precios mayoristas de la electricidad bajo control, ya que las principales tecnologías eólica y solar tienen unos costes marginales prácticamente nulos”. Confirma la experiencia que hemos podido comprobar en España durante el primer trimestre de este año cuando la mayor producción renovable ha reducido el precio mayorista de la electricidad a la mitad del precio medio de 2012.

La Comisión considera que los regímenes de ayuda a las renovables no han de ser rígidos y deben tener en cuenta el significativo descenso de los precios que ha supuesto el desarrollo de las tecnologías, pero los cambios bruscos y con carácter retroactivo de los regímenes de ayuda han contribuido a crear inseguridad y eliminar inversiones. Se estima que la aplicación de la Directiva de renovables 2009/28/UE puede suponer una reducción de costes en el sistema energético global de 8.000 M€ si se aplican los mecanismos de intercambio de energías renovables a escala de la UE y la creación de tres millones de puestos de trabajo de aquí a 2020 si se alcanza el objetivo del 20% de consumo de renovables.

En cuanto a los pagos por capacidad a los combustibles fósiles, principalmente gas y carbón, para que respalden un alto porcentaje de energías renovables, la Comisión Europea critica este planteamiento como económicamente ineficaz y porque “perpetua tanto la fragmentación del mercado interior de la energía como la producción de combustibles fósiles”, y propone otras medidas como la inversión en interconexiones transfronterizas, planes de gestión de la demanda y el almacenamiento de energía.

La Comisión Europea reitera la Estrategia Europa 2020 basada en los objetivos del 20% de renovables, ahorro de energía y reducción de CO2 acordados por los Jefes de Estado y de Gobierno y la hoja de ruta energética para 2050 basada en una reducción del consumo de hidrocarburos y mayores objetivos de renovables para promover una economía baja en carbono y competitiva. Las políticas para avanzar en esa hoja de ruta son la eficiencia energética, un mercado energético integrado con mucha más competencia y el cumplimiento de los objetivos de la directiva de renovables.

La Comisión establece una política energética que contradice los criterios expresados por las eléctricas europeas antes del Consejo Europeo. En el fondo de esa política subyace una gran preocupación por la factura anual de 406.000 M€ que suponen para Europa las importaciones de gas, carbón y petróleo, equivalentes al 3,2% del PIB europeo. Más preocupante debería ser para España con una dependencia energética mayor.